Domingo, toca salir con la Vitoriana. Las piernas están bastante resentidas del sábado, pero vamos a comprobar si a pesar de todo son capaces de aguantar.
A las 9:00 h en la Fuente de Los Patos, con la grupeta casi al completo. Yo creo que los únicos que no están son Juan y Enrique, el resto todos presentes y eso que la etapa es durilla, subir Azaceta, ir hasta Bujanda y de aquí subir a San Román de Campezo, en Urturi firmas y luego por el Puerto de Vitoria a Gasteiz.
Como siempre la salida es tranquilita y una vez que empezamos las primeras rampas de Azaceta, los galgos pasan adelante e imponen su ritmo. Hoy no es día de chulerías (básicamente porque no tenemos cojoncillos, no por falta de ganas) con lo que lo subimos a ritmo más o menos tranquilo, porque las palabras tranquilo y subir en puerto en la misma frase en mi opinión son totalmente incompatibles.
La bajada sí que la hacemos tranquilos, ya que parte de la gente que ha subido primero se han dado la vuelta y han bajado a buscar a alguien o se han quedado arriba esperando.
Con todo llegamos a Bujanda y aquí comienza la segunda ascensión del día. En esta si que nos crecemos tontamente y queremos ir con los de adelante, pero enseguida veo que ni de coña soy capaz de seguirles, como lo sigo intentando (a cabezón si que no nos gana nadie) pues reviento y luego se me hace el puertecito más largo que un día sin pan, es la primera vez que lo subía, pero madre mía lo largo que se me hizo.
Una vez superado San Roman de Campezo, nos arrejuntamos otra vez unos cuantos y descubrimos con gran consternación (según la RAE “Conturbar mucho y abatir el ánimo”) que antes de llegar a Urturi tenemos que subir una pared, no es muy larga, pero tiene una pinta horrible.
Otra vez a sufrir como un perraco, creo que metí todo, y si no es así, me sobró como mucho un diente del último piñón y unos cuantos kilos.
Una vez arriba, bajar a Urturi, localizar el bar de firmas y a reponer fuerzas.
Con tanto estrés por el transcurso de la mañana se me olvidó firmar, pero bueno, a estas alturas creo que eso ya está solucionado.
A partir de aquí, ya toda la grupeta partimos hacia Vitoria-Gasteiz. Por el camino, se nos quedan Jose, Javi Txiki, Dani y Felipe, y el resto continuamos más o menos tranquilos, con algún ataque de Okariz, pero que no consigue consumar, a pesar de que le damos ventaja…….
Por el camino, la máxima autoridad entre los presentes D. Miguel acuerda por Decreto de Txirrindulari, que en vez de subir por el Puerto Vitoria, vamos a subir por Zaldiaran, con lo cual alargamos un pelín la etapa.
Aquí, otra vez se produce el ataque de un espontaneo, al cual responde el hermano de Ramón y otro más que no conocemos, pero que enseguida cede y es alcanzado por el resto.
Al final, los dos primeros desaparecen de la vista, el resto lo subimos al tran-tran (en mi caso deseando que acabara de una santa vez), reagrupamos arriba y en la bajada, poniendo la directa para llegar al servicio de avituallamiento homologado por la grupeta, para tomar un delicioso batido de cebada con unas agradables y reconstituyentes olivas, a las que nos invito Dani, ya que el otro día fue su cumple.
P.D.- Felipe, necesitamos que nos vuelvas a sacar fotos, las que tenemos si las publicamos, provocarían que el blog perdeiera el carácter sano y deportivo que le caracteriza.
Dani cogio catarro o se estaba secando las lágrimas de la emoción que le entró al cantarle Zorionak
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