miércoles, 19 de octubre de 2011

Salida Vitoriana 16.10.2011

Amanece, como en días anteriores, el día fresco y soleado sin dar pistas sobre la niebla que encontraremos durante la ruta de hoy. El recorrido será una repetición de la que tuvo lugar el 28 de abril con destino Urturi.
En el punto de salida habitual, a las 9 de la mañana, nos vamos reuniendo los integrantes de nuestra grupeta con el resto de socios y simpatizantes de la Sociedad Ciclista Vitoriana. Son destacables algunas ausencias y también la grata presencia de compañeros con los que no habíamos coincidido hace un tiempo.
Tomamos la salida camino del puerto de Vitoria serpenteando por las calles aún vacías de transeúntes. 
En la primera dificultad del día se plantea una subida en grupo con lo que coronamos todos sin mayores incidencias.
Bajada soportando la baja temperatura del día y en Uzquiano se produce un sprint masivo como si de una meta volante se tratara, a partir de ahí habrá un pequeño corte que quedará diluido antes de Ventas de Armentia. 
Giro hacia Obécuri discurriendo agrupados hasta las estribaciones de la primera subida. Desde ese punto, por la dificultad del terreno y el ritmo de marcha, los miembros de la grupeta quedarán dispersos entre los distintos pequeños grupos que se van formando, llevando representantes prácticamente en todos y cada uno de ellos.
En la niebla que nos acompaña vamos encontrando a ilustres veteranos de nuestra sociedad que habían partido algún tiempo antes y a los que desde aquí mandamos un afectuoso saludo. Llegada a Urturi, repartidos en los diversos grupos y tras la firma correspondiente y corta parada iniciamos el retorno por Corres, no sin antes ralentizar la marcha y espera por ligera avería mecánica con la cadena de uno de nuestros componentes. 
El retorno lo realizamos agrupados, con alguna ausencia que se ha tomado el día con tranquilidad. Tras las continuas subidas y bajadas llegamos a Maestu, por fin ha salido el sol, y de ahí hacia el puerto de Azáceta.
La llegada a Vitoria se realiza igualmente juntos, no sin un cierto esfuerzo de uno de nosotros por el ligero despiste en el cruce de Aberasturi y el ritmo vivo con que se retorna en los últimos kilómetros. 
Toca a su fin la mañana con la habitual charla y refrigerio bajo, ahora sí, un sol espléndido. Pronto echaremos de menos días como éste tan agradables de otoño, pero eso será otra historia.





Por Jose Ramon Fdz. de Gamboa Barberan 

1 comentario:

  1. Bonito recorrido, si señor.
    Aunque las fotos no corresponden con ese día.

    ResponderEliminar